Por cuestiones prácticas, la conversación registrada entre María Inés (el nuevo hermoso ser humano) y Dios (el ser que es y no es) llevará el siguiente formato. Letras cursivas en las palabras de María Inés, letras obscuras en las de Dios.

(Conversación registrada el jueves 31 de enero del 2019 alrededor de las 7:00 a.m.)

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¿Por qué nos explicas todos los secretos del Universo y de la vida, y, justo en el momento que llegamos a la Tierra, nos privas de la capacidad de hablar?

Si te permitiera comunicar lo que hoy sabes, matarías todo al momento de decirlo. No habría un porque vivir. No habrías tu.

Lo entiendo. Pero, mas bien, mi pregunta es; ¿por qué nos los explicas del todo? ¿Por qué no solamente crearnos y dejarnos “bajar” en completa ignorancia?

Es mi única forma de, eventualmente, hacerte sentir que has aprendido algo inmenso, inexplicable y eterno.

Pongámoslo así, algún día tu padre te enseñara a andar en bicicleta. Jamás olvidarás ese día y te podrás subir a una bicicleta cuantas veces quieras. Al mismo tiempo, siempre recordarás el día y momento en el que lo aprendiste. Así le darás orden a tu vida, lo marcarás con un numero que conocerás como tiempo y fecha.

Sin embargo, en ese preciso momento también aumentará el amor y la significancia hacia tu padre. La diferencia es que, aunque jamás sabrás cuando empezó ese amor, mucho menos la forma en la que aumenta, siempre estarás segura de que existe.

Lo sabes porque lo aprendiste aquí, no en la Tierra.

“Got it God” (los niños, antes de ser niños, saben hablar todos los idiomas del mundo).

Bueno, he pedido hablar contigo porque, en las conversaciones con mi madre, mi padre ha mostrado una peculiar inquietud y me gustaría ayudarle a resolverla.

Lo sé. Recuerda que ya sabía que vendrías aun antes de que tu lo pensaras.

Sé que tu padre necesita una respuesta para descansar.

¿Consideras que su inquietud es insignificante? Quizá te estoy haciendo perder el tiempo.

En primer lugar, el tiempo es algo que solamente experimentarás “allá abajo”, aun no tienes que preocuparte. En segundo lugar, la relevancia de querer saber si los Patriots son el mejor equipo en la historia y si Tom Brady es el mejor jugador de todos los tiempos, es tan relativa como la vida misma. Tu padre creció entendiendo las virtudes de ese juego, para el es importante. Otra gente crece viendo La Academia.

¡Que emoción! ¡Eso quiere decir que, finalmente, contestarás a tan controversial pregunta!

Verás, te decepcionará lo que te voy a decir, pero la pregunta de tu padre, y la de miles de humanos, es incorrecta. No se trata de saber si Tom Brady y los Patriots son los mejores de todos los tiempos, se trata de preguntarse si lo queremos saber realmente.

Ok, “here we go again”, tu explicación sobre la importancia de lo desconocido. El punto no es la respuesta sino el constante debate…la incertidumbre. En otras palabras, nos prohibirás eternamente de saber si Brady es el mejor de todos los tiempos pues te entretiene el simple hecho de vernos discutir.

Aunque no solamente me entretiene, sino me divierte mucho, tu lógica no es del todo correcta. Lo que trato de explicar es que he programado a los humanos, incluyéndote, con una interesante necesidad de crear posiciones, definiciones, comparaciones y rankings para TODO. Sin éstas, sienten que las cosas pierden significado. Les es muy difícil definir algo simplemente como lo que es…ese algo.

Los Patriots y Brady son. Su dinastía, constante victoria y éxito es solamente eso.

¿Me estas diciendo que es imposible compararlos?

Evidentemente, compararlos es posible. Es por eso por lo que cosas como; la octava victoria consecutiva en AFC Championships, la quinta aparición en Super Bowls en ocho años y los catorce de diecisiete años que llevan ganando al menos un juego en post-temporada, resaltan en la mente de los humanos.

Cuando las cosas nunca se han hecho con anterioridad, inmediatamente intentan ponerlas en contexto de otras épocas. Una total incongruencia.

Entiendo, ¿pero que me dices cuando cruzamos épocas y, aun en diferentes, lograron hacer cosas nunca vistas? Del 2001 al 2007, llegaron a cuatro Super Bowls. En estos últimos diez años, lo volvieron a hacer.

Si, inclusive se te olvida que, de ganar este Super Bowl, serán el único equipo con treinta y cinco jugadores con al menos tres campeonatos. Algo que solamente es posible en un espacio de tiempo como el que estamos presenciando.

Y, este, es justo el punto que intento aclarar.

No es que la comparación no pueda hacerse. No es que el nombre de Joe Montana no pueda escribirse a lado del de Brady, sino que, en la constante búsqueda por hacerlo, perdemos de vista la grandeza del momento.

En su temporalidad, no en su comparación, el equipo encuentra su belleza.

En otras palabras, cada segundo que debatimos sobre si Bill Belichick es mejor o no que George Halas, es un segundo que desperdiciamos en solamente apreciar la particularidad del coach, equipo y jugador…en apreciar el momento.

Sí. Es por eso por lo que, en la Tierra, todos los grandes logros aumentan en valor entre mas pasa el tiempo. Por eso, la gran mayoría de las estatuas son de gente muerta.

¡Ok! Entonces, mi misión no es llevarle la respuesta a mi padre, sino convencerlo de que tiene que dejar de hacer la pregunta. Pero…

Lo sé, ¿cómo podrás convencerlo?

No puedo hablar, no puedo escribir. No puedo…

Tranquila. Es aquí en donde te ayudo.

Tu incapacidad de hablar es justo el medio perfecto.

Cuando te tenga en sus brazos por primera vez, su tiempo dejará de existir, su espacio será infinito y perderá toda capacidad de comparación.

Cuando vea tu rostro, recordará todo lo que aprendió cuando estuvo aquí. Lo recordará porque no sabrá el origen del infinito amor que te tendrá…no sabrá explicarlo.

Cuando te sienta, sabrá que ese momento no es mejor o peor que ningún otro, que simplemente es, y es ahí, en donde encontrará su inmensa belleza.